- La tranquilidad que reina en Ajoya y sus comisarías, el apoyo gubernamental y el empleo han reactivado la vida de la región.
- Su presencia impulsa la actividad minera, agrícola y ganadera.
La tranquilidad que reina en Ajoya y sus comisarías; el apoyo en obras impulsadas por la administración municipal que encabeza el alcalde Iván Ernesto Báez Martínez con el respaldo del gobernador Quirino Ordaz y el empleo generado han reactivado la vida de la región que por años había quedado abandonada por la violencia del pasado.
Un ejemplo de ello lo tenemos en la comisaría de Jocuixtita, en la parte serrana de San Ignacio , bastión minero al cual han regresado familias completas a retomar sus actividades no solamente en las minas del lugar así como la agricultura y ganadería
Se respira tranquilidad y con esa confianza se están rescatando algunas viviendas que aún se encuentran en pie para albergar a dichas familias, esperando en breve la clínica rural, el jardín de niños y la primaria estén el cien por ciento en su capacidad de atención.
Para ello la administración del alcalde Báez Martínez se empeña en potencial el desarrollo de esta zona, traduciéndose en la llegada de una empresa minera que desde el año pasado comenzó la explotación de minerales y con ello generando empleos para el gusto y arraigo de las familias no solamente de Jocuixtita sino de varias comunidades aledañas.
En la zona de Ajoya se están realizando una serie de obras de dignificación como son el empedrado y rehabilitación de calles en la sindicatura de Ayoja además de la ampliación de redes de agua potable, levantamiento de tendidos de la red de energía eléctrica como actualmente está ocurriendo en Guillapa.
“Cómo administración municipal de San Ignacio, tenemos el compromiso y obligación de generar las condiciones para mejorar la calidad de vida, la seguridad y el bienestar de los habitantes del municipio; y en este caso en particular nos llena de gusto que las familias, antes desplazadas por la situación de violencia, hoy regresen a sus hogares y los pueblos donde por muchos años tuvieron sus raíces”, enfatiza Iván Ernesto Báez Martínez.
Cabe señalar que los poblados expresan su alegría y satisfacción por el regreso de la tranquilidad, gracias a la presencia constante de elementos de policía local, ministerial y la guardia nacional; pero sobretodo a la generación de fuentes de empleo y creación de obra.