- Está desterrando cacicazgos, vicios y mañas
Xicoténcatl Barajas
Política con Tambora Revista y Portal.
En el sufrido y aguantador municipio de San Ignacio los pobladores empiezan a notar el cambio con la restructuración y reingeniería de la administración municipal bajo el mando firme de Iván Ernesto Báez Martínez.
Los sanignacenses están siendo testigos de la desesperación de quienes integran cacicazgos que por años hicieron de la comuna un negocio redondo y familiar llevando a la práctica vicios y mañas, las cuales está desterrando el novel Alcalde.
Si hay algo que distingue al dinámico presidente municipal del serrano municipio enclavado en el sur de Sinaloa es la honestidad, el cumplimiento de palabra y la trasparencia, por eso, a pocos días de haber empezado a gobernar ha pegado un manotazo en la mesa y acomodado el mantel para demostrar que no será rehén de grupos caciquiles anquilosados.
La limpia es pareja, se acabaron los compromisos de amigos y compadres como proveedores del Ayuntamiento y las estrategias fiscales para sanear las finanzas públicas municipales son una realidad a la que muchos se rehúsan a aceptar.
La quiebra en la que encontró la Junta Municipal de Agua Potable por alrededor de siete millones de pesos es la muestra más fehaciente de cómo las anteriores administraciones mediante empresas fantasmales, facturas falsas e infladas hicieron de ésta la mejor de las cajas chicas y uno de los compromisos de campaña de Báez Martínez fue rescatarla y hacerla operable.
A un así, sin contar con presupuesto y mucho menos con solvencia económica, Iván Báez está demostrando que es él quien ya manda en el municipio, dejando en claro que no será títere de quienes se vinieron sintiendo dueños de vidas y haciendas durante trienios, saqueando al pueblo, enriqueciéndose sin recato alguno.
