ALBERTO AGUILAR.
La Ley de Austeridad Republicana promulgada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, se creó para de alguna manera impedir que los gobernadores estatales (en el caso donde gobiernan PRI y PAN entre otros contrarios a MORENA) no puedan tener acceso a los dineros y desviarlos para el 2021, para lo que se ofrezca.
Por otra parte, la acción de recorte presupuestal y el rasurar de los programas de apoyo, tienen en un vilo a los de más abajo en el escalafón de los necesitados. Los productores. Por mencionar a algunos.
Esta estrategia política de López Obrador, es acertada, pues dejará sin recursos a los gobernadores (opositores) de echar mano de esa “caja chica” para las campañas previo al 21.
Es verdad que los recursos están etiquetados y protegidos, pero existen los mecanismos y malas mañas para desviarlos. Es por eso que los funcionarios de instituciones de pesca, ganadería y demás; exigían un incrementó en los apoyos para los productores; pero López Obrador, se aseguró con la Ley de Austeridad Republicana de cortarles el agua.
Las esferas que también son dañadas con los recortes con la Educación y la Seguridad, donde también se las ingenian para los apoyos lleguen mochos.
La cartita ya está hecha.
En el caso de Sinaloa son 55 mil 659 millones de pesos para gastar el próximo 2020. Habrá que ver si los asignan o le meten rastrillo.
