- La historia de dicha tradición, de acuerdo con ancianos y cronistas, se sustenta en la pelea ancestral en la que los zitlaltecas se independizaron
La música de viento, los golpes y el alcohol enmarcan la tradición ancestral en la que hombres vestidos de mujer pelean a puño limpio para conmemorar cuando los zitlaltecas, originarios del municipio de Zitlala, del estado de Guerrero, ganaron la batalla al pueblo xochimilca de esa forma.
En ese municipio, enclavado en los cerros de la zona centro del estado, la llamada Pelea de los Xochimilcas es una fiesta en los distintos barrios; como en la mayoría de los municipios que anteceden la zona de montaña de Guerrero, las mujeres cocinan y los hombres beben mezcal, bebida hecha de agave.
La cercanía de la celebración con la Semana Santa ha provocado que esa tradición se ligue a lo católico sin embargo, la historia de acuerdo con ancianos y cronistas, se sustenta en la pelea ancestral en la que los zitlaltecas se independizaron.
Según los relatos, llegó el día en que se cansaron de abusos y saqueos, que incluía robo y violación de mujeres, por lo que vestidos con ropa femenina lograron tenerlos cerca y acabar con ellos.
Las faldas largas negras, blusas blancas y algunos collares inundan las empinadas calles de la comunidad. Cada barrio baja con su banda de música de viento y bailes hasta llegar a la plaza principal, afuera del ayuntamiento.
El calor del mezcal permite que los contendientes resistan más golpes a puño limpio y en otros casos ayuda a “noquearlos más rápido” y en la mayoría la sangre fluye En los últimos años la tradición ha sufrido modificaciones; en los años previos a la pandemia de la covid-19 la cifra de participantes disminuyó porque la violencia criminal logró mezclarse por lo que se requirió vigilancia militar, después la pandemia la frenó por completo, y ahora ha vuelto.
También se han agregado duelos entre niños y propias mujeres. Todos pelean ahora dentro de una jaula hecha para la ocasión, porque las aglomeraciones interrumpían los golpes.
En Zitlala, que en náhuatl significa “Lugar de estrellas”, los contendientes protagonizan sangrientos combates y ante la presencia de cientos de espectadores.