Tres de los cuatro aspirantes a ser candidatos a presidente del PAN impugnaron ante el Tribunal Electoral la convocatoria emitida por el partido para renovar su dirigencia nacional. Reclamaron que los requisitos son excesivos y que hay una intención de beneficiar a la planilla de Marko Cortés y Héctor Larios, que anunciaron su alianza el 10 de septiembre, justo el día que se publicó la convocatoria, retrasada cinco días.
“La convocatoria fue publicada conforme a los tiempos que benefician a la planilla que encabeza Marko Cortés, toda vez que, si la convocatoria fue aprobada por la CONECEN el pasado 5 de septiembre del 2018, ¿por qué se publica minutos después a que uno de los candidatos lograra un acuerdo en la participación? Permite presumir la inequidad en el proceso y, además, la parcialidad de las autoridades encargadas de organizar y supervisar la renovación de la dirigencia”, señaló el texto, al que Animal Político tuvo acceso.
La impugnación fue presentada el pasado viernes por Manuel Gómez Morín Martínez del Río, José Luis Espinosa Piña, Ernesto Ruffo –que han solicitado su registro como candidatos– y por Mirelle Alejandra Montes, crítica de la dirigencia saliente.
Uno de los argumentos principales de la impugnación fue que el porcentaje de firmas requerido por la comisión electoral del PAN es excesivo, debido a que solicita 10% del padrón, 28 mil 33 apoyos. Detalló que si a nivel federal, la Constitución pide a los aspirantes independientes a presidente o legislador federal 1 o 2% de la lista nominal, debería considerarse esta cantidad para “maximizar el derecho humano a ser votado”.
El otro punto es la dispersión geográfica, ya que mientras para las candidaturas independientes sólo se pide cubrir 17 estados, el estatuto panista obliga a reunir firmas en mínimo 20 entidades. Sin embargo, según explicó el documento, la convocatoria limita a tener máximo 5% del padrón en un estado, es decir, mil 402, sin considerar que cada lugar tiene cantidades muy diferentes de militantes, como Tabasco, donde apenas hay mil 312 panistas con credencial.
“Existen entidades federativas que, asumiendo una participación del 100% podrían dar el apoyo hasta 17 candidatos distintos, hay otras entidades que, por razón del número absoluto de militantes, no alcanzarían el tope de un solo candidato. (…) Esto da como consecuencia que, al necesitar una dispersión de al menos 20 entidades federativas, una campaña se pueda enfocar en conseguir el tope de firmas en las 12 entidades con menos militantes e inhibir la participación de otras alternativas”, criticó.
Los inconformes reclamaron también que se exija entregar las firmas por escrito y no de manera digital, y acusaron que la propia presidenta de la comisión electoral, Cecilia Romero, ha reconocido que el padrón no es confiable.
Recordaron además que el propio Larios denunció, antes de unirse a Cortés, que éste tenía acceso al padrón porque era el candidato de la continuidad a la dirigencia actual, y que los militantes estaban recibiendo llamadas para apoyarlo.
Por todo ello, solicitaron al Tribunal que declare la inaplicación de los requisitos de porcentaje y dispersión de apoyos a los candidatos, se integren los medios tecnológicos para agilizar el procedimiento, se amplíe el plazo para recabar apoyos –de sólo 19 días– y se posponga el proceso interno hasta que haya certezas sobre el padrón.