Las lluvias que han azotado la región trajeron como consecuencia el reblandecimiento de las bases de los durmientes de via de ferrocarril, por lo que estos no soportaron el paso de un tren de carga, mismo que en la madrugada de este jueves se descarriló en el tramo Puga – Tépic, al abrirse los durmientes.
El percance ocurrió a cuatro kilómetros del poblado de La Mora, cercano a la capital nayarita.
Las autoridades señalan que fue el exceso de humedad la causa de que los durmientes se abrieran y el ferrocarril se fuera de lado; afortunadamente los daños fueron solamente materiales sin pérdidas humanas ni heridos que lamentar.
Varios de los vagones junto a la locomotora quedaron recostados sobre el lado izquierdo de las vías ferroviarias.
Fue la locomotora número 4059.
De acuerdo con personal de Ferromex que se encuentra en el lugar, de 8 a 10 horas tardarán en retirar el ferrocarril del lugar, mientras que señalaron que no habrá circulación por la zona “durante algunos días”.