– Cinco fueron decapitados y uno colgado; siete de ellos formaban parte de una familia.
Impactante y sanguinario hecho ocurrió en la comunidad serrana concordense del Aserradero de El Batel, cercano a la sindicatura de Potrerillos, lo que ha conmocionado a toda la población.
Los hechos ocurrieron sobre el camino a El Ocote, cuando un grupo armado que mantiene asolada a las comunidades de la región atacaron la tarde noche de ayer viernes a estas personas, de las cuales siete integran una familia.
Los ocho fueron metidos al monte donde los torturaron y finalmente asesinaron a balazos a dos, cinco fueron decapitados y uno más colgado; obligando, de nueva cuenta, a que muchas de las familias de estos poblados vuelvan a pedir auxilio para salir desplazados de estas comunidades pues ya no aguantan este tipo de hechos.
Elementos militares y de la policía acudieron a la zona y encontraron, cerca de las ocho de la noche, los cuerpos a cuatro kilómetros de la comunidad de Potrerillos.
Habitantes de este último pueblo acudieron al lugar de la masacre y los identificaron como personas que trabajaban en el campo y no se metían con nadie.
Cinco de ellos fueron degollados y sus cabezas quedaron en un lugar diferente al cuerpo, uno más fue colgado y dos a balazos o pedradas, no se ha establecido totalmente.
Las víctimas son integrantes de una familia, sus nombres serian Ernesto y Efrén; sus sobrinos Aarón, Rubén y Erasmo, murieron decapitados y sus primos Ibro y Rosendo y José un amigo de ellos.
Aparentemente al ir por ese camino se toparon con un grupo armado y los asesinaron solo por placer.
Una camioneta Ford Lobo, de color azul, fue localizada cerca de donde fueron encontradas las víctimas
Agentes de Policía Militar y Municipal acudieron al lugar del hallazgo lo mismo que peritos de la Fiscalía General, quienes iniciaron con las primeras investigaciones de este caso.
Luego de estos hechos ha habido un total hermetismo; pero ya trascendió que varias familias están realizando el éxodo hacia la cabecera municipal de Concordia, con lo que vendrían a sumarse a las más de 500 que hace menos de dos semanas salieron de Chirimoyos y La Petaca.