El cuerpo sin vida que fue encontrado en las playas de Celestino Gásca, del municipio de Elota, está bajo muestra genética del ADN para comprobar científicamente que se trata de Gerardo Lizárraga, el atunero que desapareció el pasado 18 de septiembre tras caer accidentalmente de un barco atunero, pero que propietarios de la embarcación mintieran a la familia asegurando que su familiar había bajado por su propio pie el 19 de septiembre, pero que tras indagar la hija de Gerardo, que su padre nunca salió por la puerta de la empresa según informaron los mismos guardias de seguridad privada de la empresa atunera.
El jueves 26 de septiembre la familia de Gerardo acudió ante el gobernador Quirino Ordaz Coppel, para exigirle les ayude a buscar el cuerpo de su padre en el mar, el gobernador se comprometió a apoyar. El viernes 27 durante la mañana el cuerpo de una persona desconocida sale a flote en las playas de Celestino Gásca. Por unas pulseras que le encontraron al occiso la familia aseguró que se trataba de Gerardo Lizárraga.
El vicefiscal en la zona sur, Cruz Alejandro Flores Salazar, dijo que oficialmente no está identificado el cuerpo pues presentaba un alto grado de descomposición, pero que serán la pruebas del ADN que se realizan en Culiacán las que determinen si en realidad se trata de Lizárraga. Familiares de Gerardo Lizárraga, están a la espera de los resultados.