- La judoca ‘patasalada’ que entrena con el sensei José Manuel Núñez, se prepara a tope para encarar la justa que tendrá lugar del 16 al 18 de junio, en Tlaxcala
- Tiene apenas 17 años de edad, pero el enfoque de alcanzar uno de sus máximos rendimientos en la Olimpiada Nacional de Judo.
La mazatleca, Samanda Jamileth Palomares Mendoza, quien el 8 de abril, en Monterrey, Nuevo León, clasificó a las finales de la justa amateur más importante a nivel nacional quiere regresar a casa con una medalla de la justa que tendrá lugar del 16 al 18 de junio, en Tlaxcala.
“Durante mi estancia en el Macro Regional hubo una competencia en la que me lastimé y ahorita estoy en descanso activo, trabajando la parte superior, pero mentalizándome, tengo planes de ganar el nacional, me siento motivada para hacerlo”, compartió la deportista, quien está lista para portar con orgullo el judogi sinaloense y defenderlo en la Olimpiada Nacional.
El sensei José Manuel Núñez, destacó la disciplina y determinación que ha mostrado Samanda en el proyecto competitivo que tiene como objetivo posicionarla como la mejor exponente de todo el país de la categoría Sub-21 Femenil +70 kilogramos.
“Hablar de Samanda es hablar de disciplina, de carácter fuerte, es una niña diestra, tiene mucha perseverancia, tiene su sentido de ubicación, muchos valores, muy trabajadora y carismática, se ríe de todo. Siempre que hemos tenido algunos detalles con algunos compañeros ella es la primera que dice yo apoyo, tiene eso, el apoyo mutuo hacia la gente”, compartió Núñez Gutiérrez.
La judoca “patasalada” lleva dos años preparándose a conciencia, de lunes a viernes, en el área de Judo de la Universidad Autónoma de Sinaloa, desde las 16:00 y hasta las 19:00 horas, con jornadas de entrenamiento que se extienden los sábados, de las 8:00 hasta las 11:00 horas.
Con el respaldo del Gobierno de Mazatlán y del Instituto Municipal del Deporte Mazatlan, una mentalidad firme y disciplina constante, Samanda Palomares se destaca como una de las grandes promesas del judo sinaloense, ya que su entrega y pasión por el deporte la impulsan a dar todo de sí en el tatami.