Trump es “el último y más extremo síntoma de lo que está mal en Estados Unidos”, pero remplazarlo será el primer paso de la lucha, aseguró la senadora.
Este sábado, en Lawrence, Massachusetts, la senadora demócrata Elizabeth Warren formalizó su aspiración a la candidatura de su partido a la presidencia de Estados Unidos para las elecciones de 2020, .
Warren aseguró que lo que necesita Estados Unidos es un cambio estructural en favor de los trabajadores que “ya han sufrido mucho”.
El anuncio lo hizo frente a decenas de personas que se dieron cita la en Everett Mill, el histórico edificio de ladrillo rojo en donde un grupo de mujeres, muchas de ellas inmigrantes, iniciaron una de las huelgas laborales más significativas de Estados Unidos en 1912. Ahí manifestó que el presidente Trump es “el último y más extremo síntoma de lo que está mal en Estados Unidos”.
Sin embargo, aseguró que remplazarlo sería solo el primer paso para lucha contra un sistema inclinado en favor de los ricos. El actual mandatario ha dejado claras sus intenciones por reelegirse en 2020.
“Hoy en día, millones, y millones y millones de familias estadounidenses también luchan por sobrevivir en un sistema que ha sido diseñado, creado por los ricos y bien conectados“, dijo Warren. Añadió: “Como las mujeres de Lawrence, ¡estamos aquí para decir que ya basta!”
Según reportó el periódico estadounidense, The New York Times, Elizabeth Warren subió al escenario con la canción 9 to 5 de Dolly Parton, la cual es parte del soundtrack de la cinta del mismo nombre, en donde tres mujeres trabajadoras idean la manera de poner un alto su jefe machista.
En alusión al tema, Warren señaló que es consciente de la desigualdad que existe entre pobres y ricos, e incluso narró algunos episodios de su vida en donde pudo constatarlo al pasar de ser la hija de un conserje a convertirse en profesora de derecho y posteriormente senadora.
“Cuando menciono estos temas, algunos ricos lo señalan como una ‘guerra de clases’“, señaló la senadora y agregó, “Bueno, déjenme decirles que esos mismos ricos son los que durante años han ejercido una lucha en contra de los trabajadores y digo que es hora de contraatacar”. La gente comenzó a vitorear su llamado y a secundarlo con gritos de “suficiente, ya es suficiente”.