- Criminales exigieron a los migrantes datos personales y contactos de sus familias
Un total de 38 personas fueron secuestradas de un hotel en el municipio de Matehuala, en el estado de San Luis Potosí, y liberadas horas después en una comunidad localizada a unas millas de distancia.
Un comando armado llegó al hotel Sol y Luna, y se llevó a las víctimas, entre las que se encontraban extranjeros posiblemente migrantes originarios de Haití, Cuba, y posiblemente algunos venezolanos.
De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía del Estado, los criminales llegaron a bordo de tres camionetas.
Los sujetos entraron al establecimiento, donde amagaron al personal, causaron destrozos y se llevaron a 16 personas mexicanas y 22 extranjeras.
También se llevaron la bitácora de registro del hotel, presuntamente para tratar de evitar que sus víctimas fueran identificadas con facilidad.
Casi de forma inmediata, las 16 personas mexicanas fueron liberadas cerca de una tienda de conveniencia en la misma ciudad de Matehuala.
Sin embargo, los extranjeros permanecieron privados de la libertad por varias horas más.
El fiscal del Estado, Federico Garza, explicó que los extranjeros fueron localizados en una zona despoblada cerca de la comunidad de Cerrito Blanco, todavía en San Luis Potosí, en un camino que conduce al municipio de Doctor Arroyo, Nuevo León.
La Fiscalía del Estado dio aviso de la situación al Instituto Nacional de Migración (INM), para corroborar la situación legal de los extranjeros en territorio nacional.
“Con apoyo de la Guardia Nacional, nos llevaron a establecer la posible ruta por donde los habían conducido y se logró el rescate de estas 22 personas“, señaló el fiscal.
Entre este grupo de víctimas se encontraban 3 menores de edad y una mujer embarazada.
Los 22 extranjeros fueron trasladados a la capital de San Luis Potosí, donde serían entrevistados para que narraran lo ocurrido.
No se ha informado sobre la detención de alguno de los responsables ni a qué grupo criminal pertenecía. Tampoco se dijo el móvil del secuestro.
Por estos hechos, la Fiscalía General del Estado de San Luis Potosí inició una investigación.
“Envié personal para que se aboquen a la investigación, independientemente de haber girado instrucciones específicas al personal que tenemos en Matehuala para que se aboquen al análisis”, dijo el Fiscal Garza por la mañana, cuando dio a conocer los hechos.
La dependencia agregó que a las víctimas les brindaría apoyo psicológico, médico y alimenticio, al tiempo que la mujer embarazada sería valorada médicamente.
El fiscal explicó que los criminales exigieron a los migrantes datos personales y contactos de sus familias.
Ya se apoyó para informar a las familias sobre su situación y evitar que sean extorsionados.