- Cuatro siglos de historia han forjado el carácter de una población noble y trabajadora.
- Quirino e Iván Báez trabajan con ahínco para restaurar el esplendor que merece.
Entre una naturaleza majestuosa y el orgullo de su gente, Ajoya recupera la confianza en sus autoridades.
Las lluvias han caído recientemente; el verdor se enseñorea a lo largo del camino que nos lleva de la entrada a la cabecera municipal de San Ignacio, a la histórica comunidad de Ajoya.
Son treinta minutos de caminos, entre el verdor pero también con un calor que abraza producto de la evaporación. Las laderas están llenas de vida, verdes; en un pequeño arroyuelo en mitad del camino nos permite apreciar el correr de un agua cristalina; hay pequeñas riadas; y algo que llama la atención: cientos de mariposas amarillas y blancas.
Era nuestro deber acudir.
¿Motivos?, bastantes.
Una comunidad llena de historia, asentada con fondos de postal y estampa; con 400 años de historia. La primer visita de un gobernador del Estado a la comunidad y el cumplimiento de la palabra empeñada, el compromiso de un alcalde como Iván Ernesto Báez Martínez quien tiene claro que la trascendencia de una administración se encuentra en el trabajo continuo; en el acompañamiento de sus paisanos.
Al momento de entrar a la sindicatura, la primera impresión que nos queda es que esta comunidad ha dejado lejos el aciago acontecimiento del 10 de mayo de 2002, cuando fuerzas oscuras irrumpieron a violentar la tranquilidad del poblado, lo cual motivo un éxodo de tal magnitud que de los 400 pobladores solamente quedaron 15 familias en el lugar.
“Quiero decirle señor Gobernador, con todo respeto a las personas que están aquí, que Ajoya está resurgiendo de las cenizas en que estaba por los azotes de la violencia que se vivía aquí en Ajoya. Quiero decirle que la gente está volviendo con la esperanza de volver a sus casas con la esperanza de volver a activar su vida y patrimonio económico en esta comunidad,” señaló el alcalde Iván Ernesto Báez el pasado viernes en el marco de la visita del gobernador Quirino Ordaz.
Agregó que se están habilitando calles, casas, bibliotecas y clínicas, sin embargo se requiere de que se les eche la mano con rehabilitar escuelas y calles.
A dicho llamado hecho por Iván Báez, delante de la gente de Ajoya, misma que aguantó con entusiasmo el calor abrasador; respondió Quirino Ordaz anunciando un paquete de obras por 4.5 millones de pesos, mismas que empezarán a ejecutarse en esta semana.
“Yo soy hombre de palabra, les prometí que iba a venir con Ustedes y aquí estoy. Yo no soy rollo, soy hombre de palabra y habré de volver .paar inaugurar junto con Ustedes estas obras”, señaló Quirino.
San Jerónimo de Ajoya, se encuentra ubicado en la margen derecha del río que desemboca en el Piaxtla.
Como sindicatura tiene jurisdicción sobre las comisarias de Caballo de Abajo y de Arriba, campanillas, Cieneguillas, Carrizal, Chilar, Duranguito de Ajoya, Guilapa, Jocuixtita, Río Verde y Verano.
San Jerónimo de Ajoya celebra a su santo patrono el 30 de septiembre, y luego del aciago 2002 tardo 16 años en volver a celebrar la fiesta, que de acuerdo a las crónicas se empezó a venerar en 1630 con los primeros pobladores, en su mayoría indígenas.
Ha tenido fluctuaciones en su numero de pobladores. En 1760 tenía 442 habitantes y y 18 años después solamente 12.
Empero, Ajoya, en 1870 llego a ser sede de la alcaldía de San Ignacio.
Fue el pasado viernes, como ya se asentó líneas arriba, cuando por vez primera un gobernador visito la comunidad; siendo éste Quirino Ordaz Coppel, acompañado del alcalde Iván Báez Martínez presidente municipal de San Ignacio, la presidenta del Sistema Dif San Ignacio Sinaloa, Elizabeth Covarrubias de Báez, el secretario de desarrollo social, Ricardo Madrid, la directora general de Seguro Popular, Rosa Elena Millán, el diputado Faustino Hernández y el síndico José Pilar Samaniego.
Además del banderazo de obra en materia de asistencia social se brindaron consultas médicas gratuitas, lentes, despensas alimenticias, apoyos para la tele secundaria de la comunidad, abanicos, aires acondicionados y tinacos.
Ajoya, ubicada a 228 metros sobre el nivel del mar, a treinta minutos de la cabecera municipal cuenta de acuerdo al censo con 132 viviendas y 82 hogares.
Las obras que iniciarán en los próximos días van desde introducción de agua potable, adoquinamiento de las calles aledañas a la plazuela del poblado, mejoras a las infraestructura y la iglesia del lugar.
Si desea conocer más acerca del poblado de Ajoya, municipio de san Ignacio; en redes puede visitar los portales: https://mexico.pueblosamerica.com/i/ajoya/; http://www.nuestro-mexico.com/Sinaloa/San-Ignacio/Areas-de-menos-de-500-habitantes/Ajoya/;
http://www.nnc.mx/articulo/portada/el-pueblo-sinaloense-que-tenia-17-anos-sin-realizar-una-fiesta/1538531103 o bien en Youtube SINALOAN323 cuyo video lleva más de 48 mil visualizaciones.
Pero, ¿Sabe qué? Lo mejor es visitarlo, cuando vaya a San Ignacio, Sinaloa; Ajoya es un lugar especial para los amantes de lo tradicional, la naturaleza, el senderismo y la fotografía.
Su gente noble y amable le atenderá con la gentileza que se merece.
